En los últimos días, ha tenido lugar uno de los eventos astronómicos más conocidos del año: la lluvia de meteoros de Las Perseidas. Como explica la wikipedia, el origen de esta lluvia de estrellas es un cometa conocido con el nombre 109P/Swift-Tuttle que, curiosamente, presenta una órbita con una probabilidad relativamente alta de colisionar con la tierra en un futuro lejano.
Pero más allá de esta conocida lluvia de estrellas, en los últimos tiempos están teniendo lugar algunos acontecimientos dignos de observación. Por mencionar sólo un ejemplo, Marte y Venus han pasado durante este verano por su perigeo. Esto significa que han estado en sus puntos más cercanos a la Tierra y ha sido posible observarlos a un tamaño muy superior al habitual en el cielo nocturno, convirtiéndose en los astros más brillantes del cielo.
Nos dirigimos hacia una nueva carrera espacial
Desde tiempos inmemoriales, el ser humano siempre se ha maravillado mirando hacia el cielo y ha soñado con viajar a lugares recónditos de nuestro universo. Estamos muy lejos de poder conseguir algo así, por supuesto, pero la llegada del hombre a la luna fue un gran hito en la historia de la humanidad. Y lo mejor está, sin duda por venir:
- El siguiente gran paso de la exploración espacial será la llegada del hombre a Marte, nuestro planeta vecino, que cada vez está más cerca de hacerse realidad. Por no hablar de los diferentes rovers y las sondas espaciales que han estado analizando el planeta en los últimos años, incluso extrayendo restos y muestras de su superficie.
- Por primera vez, unos aparatos humanos como las sondas voyager están traspasando los confines del sistema solar, en busca de respuestas científicas más allá de nuestro vecindario cósmico.
- Recientemente se acaba de enviar una sonda en dirección al sol, nuestro astro rey, con el objetivo de estudiar la composición y el comportamiento de su corona (la parte más externa de su atmósfera). Es la sonda Parker Solar Probe. Esta increíble obra de ingeniería será capaz de acercarse a una distancia realmente próxima al sol (unos 6,2 millones de kilómetros) y se espera que sea capaz de realizar 24 órbitas alrededor del sol en los 7 años de vida de la misión.
Somos algo muy, muy pequeño a nivel cósmico
Todos esos grandes avances de la astrofísica, sin duda, resultan tremendamente inspiradores. Y, como señalaba anteriormente, lo mejor está aún por venir. En los próximos siglos, es de esperar que la tecnología y la ciencia avancen a un ritmo exponencial, alcanzando límites que actualmente ni siquiera alcanzamos a imaginar. Este ha sido el gran salto que se ha dado en los últimos 50-60 años y, en la actual sociedad de la información y el conocimiento, es seguro que el ritmo de crecimiento será cada vez mayor.
Pero, a pesar de todo, el ser humano sigue siendo algo muy pequeño, casi insignificante en el conjunto del universo. Pensémoslo un momento: la gran obra científica de la humanidad en los próximos años será viajar a Marte, el planeta más cercano a la Tierra, situado a una distancia máxima de unos 399 millones de kilómetros de nuestro planeta. Pero, ¿qué es eso al lado de los 100.000 años luz de diámetro de la Vía Láctea? Se estima que nuestra galaxia contiene aproximadamente entre 200.000 y 400.000 millones de estrellas como nuestro sol. Y si tenemos en cuenta que las últimas estimaciones científicas consideran la existencia de al menos unos 2 billones de galaxias… nuestro mundo personal es infinitamente pequeño, sin ninguna duda.
Tomar esta perspectiva es muy útil para aprender a ver la vida de otra forma. Los asuntos del día a día, las preocupaciones y los problemas personales son tan insignificantes como una simple mota de polvo en el cosmos. Aprende a ver más allá, a observar cómo vienen y van sin dejar rastro y tu mundo personal dejará de ser tan dramático y tan horrible.
Sin embargo, tú también eres parte importante del universo. No lo olvides
Así es. Por mucho que la imaginación palidezca ante los grandísimos misterios del universo; por mucho que la humanidad se encuentre todavía en un estado muy primitivo en cuanto a su evolución científica y tecnológica, no debes olvidar que tú también formas parte de ese maravilloso mundo que te rodea. El ser humano, en si mismo, es un ejemplo de evolución y representa un gran salto en el devenir del universo. La formación, sea aleatoria o provocada de algún tipo de modo, de organismos vivos con una complejidad como el cuerpo humano, supone una verdadera obra maestra, que va más allá de cualquier tipo de imaginación o proceso mental.
El hecho de que tú estes leyendo este texto, prestando atención a mis palabras, en este mismo momento, ha exigido millones de años de evolución del Universo para dar forma a lo que eres en este momento. ¡Eres así de importante! Aprovéchalo, disfruta de esta extraordinaria existencia que has tenido la ocasión de vivir y deja atrás los miedos, los prejuicios y las limitaciones. Deja de juzgarte, de exigirte y de hacerte daño. Deja de aferrarte a un pasado que no volverá jamás, o de esperar a un futuro que sólo es fruto de tu imaginación. Tan sólo vive, en lugar de pensar que vives. No necesitas nada más que tu atención, Aquí y Ahora.